Viajar en pareja, como todo en la vida, tiene sus cosas buenas, regulares y el «pack a este/esta lo mato». Tu churri es una de las personas que más conoces (o eso se supone) y muchas veces… ¡la confianza da asco!
Con este resumen de maravillas y putadillas de viajar en pareja SEGURO que te sientes identificado con unas cuantas.
- Caso 1: Todos los ZARA del mundo se merecen una ojeadita
- Caso 2: hombres, mujeres y mapas
- Caso 3: Me toca a mí
- Caso 4: obsesiones y aficiones
- Caso 5: el efecto madre - hijo
- Caso 6: bomba style
- Caso 7: no sin mi playa
- Caso 8: memento mori (recuerda que morirás)
- Caso 9: todo el mundo hace pum pum
- Caso 10: felicidad compartida
Caso 1: Todos los ZARA del mundo se merecen una ojeadita
Cuando estás de viaje en ciudades medianamente grandes esta situación se suele dar en muuuuchísiiiiimas parejas.
Amancio Ortega es un tío con súper poderes, ejerce una extraña atracción hacia todas y cada una de sus tiendas del mundo, aunque no pretendas comprar nada.
¿Te suena este momento?
– «Pero para qué entras si venden lo mismo que allí»
– «Ya, no sé a mirar, son 5 minutos»
Caso 2: hombres, mujeres y mapas
Cuando juntas estas tres palabras se lía parda…
- «Que no que es por allí»
- «Joder, tu eres el copiloto, TIENES que saberlo»
- «Vas muy rápido, cuidadooo, cuidadooo»
- «Nos pasan hasta los caracoles»
- «Qué mal conduces»
- «Me pones del higadillo»
Caso 3: Me toca a mí
Creo que deberíamos llevar un cámara encima que lo grabe todo o un notario para que conste en acta. Los rifi-rafes por elegir a quién le toca hacer tal cosa están a la orden del día, desde coger ventana en el avión a preguntar cualquier cosa.
- «Te toca a ti, antes le he preguntado yo»
- «Pero yo antes antes le dije esto a fulanito así que ahora te toca a ti»
- «Habla tu que sabes más inglés»
- «Nooo, hazlo tú»
Caso 4: obsesiones y aficiones
Ninguna pareja es 100% igual, ni ambos tienen los mismos gustos, aficiones y obsesiones…sino ¿vaya rollo no?
Por ello cuando estás de viaje muchas veces surgen conflictos por realizar una actividad u otra, a uno le gusta la historia y ver piedras, al otro el partido del Real Madrid.
Caso 5: el efecto madre - hijo
No sé si sólo me pasa a mi pero…¿A veces no os sentís como una madre o padre echando la bronca a su hijo?
Cada una de las partes de la pareja ejerce un rol, el de madre/padre y el de hijo y por A o por B siempre ocurre lo mismo.
- «Échate crema que te vas a quemar»
- «Sí, sí ahora me echo» (osea no, no)
Resultado: A las 2 horas aparece uno de los dos como una gamba a la plancha y comienza la bronca:
- ¡¡Te lo he dicho, que te eches crema!!
- ¡Me dueleeee!
Caso 6: bomba style
Esto les gusta a todos los niños del mundo mundial, joder al que está en el agua tranquilamente…¿Cómo? Con el «estilo bomba».
Este comportamiento se arrastra toda la vida, lo tengo claro, es algo que no pueden evitar, lo llevan en la sangre y la mayoría de tíos, aunque peinen canas, lo repiten.
Caso 7: no sin mi playa
Este caso está estrechamente relacionado con el caso 4, casi siempre a uno de los dos le gusta la playa mucho, muchísimo y al otro poco o muy poco y el lío ya está montado…
Caso 8: memento mori (recuerda que morirás)
MADRE DEL AMOR HERMOSO, que tu pareja no se ponga «enferma» de viaje porque la tienes clara.
Vas a tener que sacar todo tu arsenal de madre-enfermera cuidadora para sobrellevar el catarro mortal, POR SUPUESTO, que lo va a llevar a la tumba.
Caso 9: todo el mundo hace pum pum
¿Por qué una de las partes de la pareja siempre tiene que tocar las pelotillas con este tema? El ser humano necesita intimidad…¡Incluso los perros! sino fíjate como vuelve la cara tu chucho cuando hace pun pun.
Caso 10: felicidad compartida
Todas estas anécdotas y pequeños piques hacen que las parejas riamos, discutamos, gritemos, lloremos y nos arreglemos de nuevo.
Al final de todo, lo que cuenta es disfrutar del viaje y compartir los buenos y malos momentos porque la felicidad SIEMPRE es mejor compartida.
NOTA: todos estos «casos» se basan en mis experiencias, cada pareja es un mundo así que…
¡Cuéntame qué piques, maravillas y putadillas tienes con tu pareja cuando viajas!
Comentarios:
24 comentarios en “Viajar en Pareja: Los «piques» más comunes”
Hola Marta,
¡Acabo de descubrir tu blog y es grandísimo! Totalmente de acuerdo con todos los piques que describes: la innumerable cantidad de veces que ha estado al borde de la muerte por un dolor de cabeza, AQUELLA VEZ que accedió a ir a la playa conmigo en Marsella… Por no nombrar la cara de gatito (en la que he conseguido desarrollar un nivel de maestría inigualable) que tengo poner para que me deje a mí la ventanilla en el avión ^^.
A lo de perdernos en los viajes en coche, ya estamos tan acostumbrados que no hay viaje que se precie sin acabar perdidos en un p*** camino de cabras (fauna incluida), hemos llegado a pensar que es el GPS que detecta que el software es pirata y le apetece trollear… ¡Pero en realidad es la salsa de cada roadtrip que hacemos!
Hola Raquel
Me alegro mucho de que te mole el blog, ¡es lo mejor que puedo leer!
¡Qué sería de los viajes sin esas aventurillas! Yo cada vez que viajo con mi novio lo quiero matar pero luego nos reímos a carcajadas con los piques.
Gracias por comentar majetona.
Un abrazo
Nada, me gusta mucho tu blog. Es de lo más animadito y diver. Es bueno despejar los miedos con un poco de humor. Algo chaplinezca esta frase, no??? Jejeje. Sigue así, que aquí tienes alguien más que siga tus hilos. Saludos.
Hola Alejandro
¡Qué alegría leer tu comentario! Espero que algún artículo te venga bien para preparar algún viaje, para darte ideas de destinos o para echarte unas risas.
¡Un beso grande y gracias por pasarte un rato por el blog!
Jajaja. Estupendo!!! Razón sí que tienes. Ese es un… «denominador común», pero cuán aburrido serían muchos momentos sin esas mismas situaciones.
¡Hola!
Pues sí, sin esa vidilla que te dan estas cosas…¡no sería lo mismo!
Lo mejor de viajar en pareja es que puedes volver a comentar los recuerdos de un viaje mil veces y volver a disfrutarlos.
Muchas gracias por pasarte un rato por aquí.
¡Un abrazooo!
¡Así que en todos los Zaras del mundo hay lo mismo, eh! Pues mi mujer me tenía engañado; siempre me decía que no, que eran prendas adaptadas al medio.
¡Hola Diego!
Jajaja, ya veo que has sufrido muchas horas de espera en un banco fuera de Zaras de medio mundo… ? ?.
Le voy a echar un cable a tu mujer…sí que cambian un poco la colección según el país.
Tu vete buscando destinos en los que no haya pisado el pie Amancio. ?
¡Un abrazo!
¡Hola Marta! Desde luego, todas reales! Me encantan las ilustraciones, menudo curro!
¡Hola Sara!
Jejeje, he «sufrido» todas y cada una de ellas en mis carnes…?
Si se te ocurre alguna más…¡cuéntamela! Todo sea por el bien común y por ahorrar en divorcios. ?
Un besote